Friday, May 29, 2020

¿Honras a Dios con tus hijos?

Corrige a tu hijo, y te dará descanso, y dará deleite a tu alma  
Prov 29:17

             Cuando nos hallamos ignorantes o inexpertos en algo, tenemos la necesidad de buscar una ayuda que nos pueda guíar para llegar a la meta. Entonces cuando empezamos a leer o ser instruídos, empezamos a entender el funcionamiento de las cosas hasta obtener mas experiencia y volvernos expertos en el uso, haciendo juicios correctos.

De la misma manera el Señor Todopoderoso nos instruye a través de su Espiritu Santo y su Palabra cómo debemos comportarnos con el prójimo y así mismo instruír a nuestros hijos. Sin embargo…¿Cómo un inexperto o neófito puede guíar a otro? ¿No lo guiará al error? ¿Cómo un niño puede instruír a otro niño? Así el niño se quedará con la mentalidad de niño y no podrá desarrollarse a menos que empiece a ser instruído por un adulto o anciano que le enseñe el camino.

Sabemos que nuestra vida tiene diferentes tiempos y etapas que tenemos que cruzar y vivir antes que otras. Eclesiastés 3:1 Todo tiene su tiempo, y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora. Es necesario conocer mejor a Dios para poder obtener sabiduría y amor para entregar esas enseñanzas a nuestros hijos. En la actualidad lamentablemente vemos mucho pueblo dormido y acostumbrado a lo que ofrece éste mundo y muy pocos son atalayas para las siguientes generaciones; se permite mucha idolatría y costumbres que no vienen de Dios y permitimos que eso moldee a nuestros hijos; además adulamos sobremanera a los jóvenes y pasamos por alto muchas manchas que se han transferido a éstas nuevas generaciones que se alejan más y más de la Verdad de Jesucristo. Muchos en iglesias organizacionales adulan a los niños y les llaman “soldados de Cristo” cuando muchos de esos niños ni siquiera tienen padres que los instruyen en el temor de Dios, y tampoco se toman el tiempo para hablarles la Palabra de Dios. Esto no es ser negativo sino objetivo; el Señor nos manda primeramente a instruírlos en su Palabra con amor y sobriedad, sin estar acariciando su ego como aquellos hijos de Elí. El Señor no nos manda alcahuetiar el engreimiento de nuestros hijos, muchas veces causado por nuestra propia culpa al haberles dejado de amonestar. Queda claro que el corregir no tiene nada que ver con estar criticando y bajando la moral a nuestros hijos sino amonestarlos en el temor del Señor y reprenderlos cuando vemos que tienen tendencia a cometer actitudes perversas. Proverbios 29:15 dice: La vara y la corrección dan sabiduría; más el muchacho consentido avergonzará a su madre.” 


Una Observación

En muchas familias está de moda poner el televisor gigante como centro de enfoque en sus salas y desde la mañana le prenden el televisor a su hijo o le dan su celular para que se entretengan por largo tiempo. Lo que están creando éstos padres (porque quizá ellos mismos ya lo están) es una pequeña atadura a sus hijos a la tecnología desde muy temprana edad y también a la bulla constante que emana del aparato. Esto es una Piedra de tropiezo para su desarrollo para que no aprendan el silencio y la reverencia ante Dios. Se entiende que alguna vez pueden escuchar y ver algo que les edifique pero no lo debemos volver una costumbre en nuestros hijos para que dependan de ello ya que puede llegarse a la idolatría y muchos terminan adictos a videojuegos y a la TELEPROGRAMACION. (Más sobre ésto más adelante) Romanos 12:2 dice: "Y no os conforméis á este siglo, mas reformaos por la renovación de vuestro entendimiento, para que experimentéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta."




Tenemos que salir del letargo y adormecimiento, volver a ser verdaderos padres de valor que instruyen a sus hijos y los entrenan en éste mundo lleno de maldad y trampas. El Señor nos manda a no ignorar las maquinaciones del enemigo sino ser sobrios y demostrarle a nuestros hijos que Cristo es más poderoso que el diablo. El Señor nos manda a indagar sus sendas antiguas para poder vivir en la Presencia del Señor y poder instruír bien a nuestros hijos. No como sea, no a medias, no como Elí. Lamentablemente Elí nunca estorbó a sus hijos a corregirse sino apañó su pecado amonestándoles suavemente cuando ellos profanaban el templo. Prácticamente Elí les permitió todo lo malo que hacían estando en el templo de Dios (1 Samuel 2). El templo de Dios ahora somos nosotros, y debemos crecer como piedras vivas en el cuerpo de Cristo y no reemplazar nuestra autoridad entregando nuetros hijos a maestros extraños que no tienen temor de Dios. Es hora que nosotros nos encarguemos de su educación, es hora que nos esforcemos y seamos valientes para obedecer el mandato del Señor Jesús y prepararnos para enseñar a nuestros hijos. Esto tendrá frutos a lo largo y nuestros hijos nos tendrán más respeto y confianza al ver el interés que hay en nosotros por ellos, en tomarnos el tiempo para involucrarnos en sus vidas.

¿Y la escuela dominical?

Tampoco nos acomodemos en la escuela dominical. Las escuelas dominicales muchas veces tienen maestros jóvenes que solo se enfocan en juegos y no enseñan esencia de la Palabra de Dios, muchos de ellos solo quieren cumplir un programa y tener diversión. Muchos de ellos tampoco han sido moldeados correctamente por Dios y sus padres; se igualan a maestros del sistema escolar gubernamental. ¿Sabes lo que le están enseñando a tu hijo en esa hora? ¿Te interesa qué doctrina y ejemplo le están inculcando? ¿Le preguntas a tus hijos que le enseñaron? Lo mejor es uno mismo instruírlo como lo manda el Señor y si no conocemos mucho, empezar nosotros mismos a buscar la voluntad de Dios en sus Escrituras y empezar a impartirles poco a poco lo que el Señor nos dá. Tampoco se trata de cansarlos con una serie de reglas religiosas sino implantarles el amor de Dios con nuestro ejemplo primero. También se puede encontrar una hermana(o) anciana de buen testimonio que pueda ayudarnos con la instrucción o nos pueda dar un consejo. Por supuesto esto se haría con mucho cuidado y dirección del Señor ya que hay muchos líderes corruptos que aparentan piedad. 


En Proverbios 22:6 dice:Instruye al niño en su carrera: Aun cuando fuere viejo no se apartará de ella La instrucción comienza desde la niñez, no cuando ya crecieron. Tampoco podemos dejar nuestra responsabilidad de ser padres al querer cumplir con un sistema religioso lleno de actividades, ventas, campamentos y entretenimientos que realmente no tiene frutos a lo largo y nos consume suplantando así la enseñanza directa que debemos dar a nuestros hijos.

 Tampoco dejemos que un sistema religioso nos absorba para no tener tiempo para ellos. La voluntad de Dios es que nos demos tiempo para instruírlos; si tenemos que detener alguna actividad demás lo haremos por amor a nuestros hijos.


La Palabra de Dios siempre nos enfatiza el amor del Padre. ¡El verdadero amor viene del Padre y ese amor instruye, exhorta, amonesta y da consolación! He aquí tenemos el perfecto ejemplo como debemos ser como padres: ¡Como Jesús!

“Trayendo á la memoria la fe no fingida que hay en ti, la cual residió primero en tu abuela Loida, y en tu madre Eunice; y estoy cierto que en ti también.” 2 Timoteo 1:5

Wednesday, September 4, 2019


El feminismo y la “Igualdad de género”
metidos en la congregación
…También un llamado al varón que retome su lugar
Por Gianella Sánchez

Intro:
Mi deseo más grande es edificar a las mujeres para que volvamos a ser las que Dios nos ha escogido; Jesús ama a las mujeres y nos da un trato más sutil porque somos vasos más frágiles. Mi deseo más grande es que recapacitemos y nos humillemos ante la poderosa mano del Señor para poder ver su Gloria. Estimo a las hermanas que fervientemente aman al Señor y desean servirle. Con todo, debemos ir corrigiéndo muchas áreas en nuestras vidas para el crecimiento del cuerpo de Cristo. ¡A la ley y al testimonio mis hermanas, si no hablamos conforme a su Palabra, es porque no nos ha amanecido!
El feminismo impone que las mujeres tenemos la misma capacidad de los hombres y podemos hacer lo mismo que ellos hacen. La igualdad de género nos dice que los sexos no importan y realmente no existe diferencia entre un hombre y una mujer, que al hacer una diferencia se está discriminando. Esto nos lleva a la palabra “homosexualismo” donde “homo” significa igual sin distinción alguna. Estas doctrinas son la raíz que conducen al sodomismo y poco a poco a la perversión total de una sociedad. Recordemos que “un poco de levadura leuda toda la masa” (Gal 5:9)

El Sueño
Una vez el Señor me dió un sueño donde yo entraba a un gran evento donde había una tarima en el centro, desde ahí había alguién ministrando a todos los que estaban en ese evento pero no lograba verle el rostro porque la gente me tapaba la visión. Sabía que era una mujer muy autoritaria que ordenaba a todos que alabaran a Dios y que alzaran su voz. Entonces decidí acercarme más para verle la cara a esta mujer que “parecía y sonaba” piadosa; cuando le ví el rostro , ví que estaba lleno de maquillaje exagerado mostrando sus piernas con una vestimenta indecorosa. En mi corazón me confundí y quise salir de allí pero no podía porque sentía que toda esa multitud me iba a juzgar como “mala Cristiana”. Sin embargo, vino la convicción de Dios en el sueño y me fuí saliendo de esa multitud hasta llegar a la puerta donde todas las guardias de seguridad eran mujeres con minifaldas y llenas de maquillaje como vestidas para un “circo”. Al salirme por completo sentí la verdadera libertad de Dios en mi ser porque había salido de un evento fantástico pero no real porque afuera encontré personas que criticaban a los cristianos por su forma tan superficial de ser y yo les decía que no todos eramos así. Inmediatamente, sentí la presencia de Dios en el sueño y me desperté llorando.

Así muchas mujeres viven ahora, un mundo fantástico y utópico donde ellas tienen el mando y el gobierno de la iglesia y donde ningún hermano les puede decir nada porque son ellas las que están a cargo. Un mundo ilusorio donde ellas son las protagonistas del show y los antagonistas somos los que tememos las Palabras del Señor y no nos queremos someter a ese sistema por amor a Jesucristo.

Estas mujeres sensuales (sensual es alguién que llama a los sentidos de la carne, emociones, etc) y los hombres que las aplauden y las apoyan están desordenando a la iglesia del Señor que tiene un modelo ya establecido. Ellos sacan de contexto el siguiente texto:
Ya no hay judío ni griego; no hay esclavo ni libre; no hay varón ni mujer; porque todos vosotros sois uno en Cristo Jesús.” Gál 3:28

Es cierto, todos somos uno en Cristo porque El nos redimió con su sangre no haciendo acepción de personas para salvar a mujeres y a hombres, no importando pueblo y nación. Sin embargo, esto no nos hace iguales a los varones en creación y propósito. Debemos entender que existe un orden, un modelo, y organización que Dios ha diseñado para complementarnos unos a otros, no para estar en guerra. El hombre no tiene lo que una mujer tiene; la mujer tampoco tiene lo que el hombre ya tiene. Biológicamente no somos iguales, acaso ¿no es ésta una señal suficiente de Dios? En cuanto a lo biológico, las mujeres somos más finas en el tamaño de nuestras extremidades y poseemos una voz más delicada que los hombres…¿será esto mera coincidencia? También tenemos una piel más delgada y bellos más delgados que ellos, una de las razones por la cuál ellos producen más testosterona (hormona masculina) y nosotros más estrógenos (hormona femenina). Si hay una caja de 50 libras ¿quién crees que lo cargaría con más facilidad y rapidez? Todas estas cosas y mucho más son el claro ejemplo que Dios nos está comunicando que somos diferentes por una razón. Y esa diferencia es complementaria, no conflictiva. Es el diablo que gobierna el mundo y sus huecas filosofías que nos susurra al oído: “No te dejes, tu también puedes ser igual que él, revélate y sé cabeza también”

Si seríamos “iguales” entonces…¿Porque Dios creó al varón primero? ¿Acaso la Biblia no dice que Eva vino después por causa de Adán? Osea fuimos creadas porque Adán necesitaba una ayuda, no una que se igualara a él. Así es, ¡desiste y cumple con tu ministerio mujer!

 “Porque Adán fue creado[h] primero, después Eva. 14 Y Adán no fue el engañado, sino que la mujer, siendo engañada completamente, cayó en transgresión. 15 Pero se salvará engendrando hijos, si permanece en fe, amor y santidad, con modestia.” 1 Timoteo 2:14

Cuanta falta hacen las mujeres que se ocupen del hogar y eduquen bien a sus hijos en el temor del Señor. Creo firmemente que la mujer puede trabajar pero la prioridad es permanecer en su hogar para formar hombres y mujeres de Dios. Las hermanas ahora están tan ocupadas en tantas actividades que Dios no las ha mandado “dando conferencias” y siendo “pastoras”, liderando hombres y vociferando como leones rugientes. Cuando viene el “día de la madre”, las iglesias exaltan tanto a la mujer, pero en la práctica no les enseñan a ser verdaderas madres porque ser madre no es solo limpiar la casa y bañar a un niño. Ser madre es educar a tus propios hijos y tomarles tiempo como las madres antiguas que no dejaban a sus hijos con cualquier desconocido para irse a ganar más dinero o ser reconocidas en un puesto, ser madre es también darle ejemplo a los hijos que posición tenemos como mujeres. En esto, el varón tiene mucha responsabilidad porque está dejando su posición de ser cabeza de familia. 

Si bien esta sociedad cree ir hacia adelante con los avances tecnológicos, está yendo hacia atrás con el comportamiento de las masas incluyendo al sistema religioso. Karl Marx, el promotor del comunismo, declaró que cuando existe la diferencia entre el hombre y la mujer en la familia hay división. Para él no debía existir ninguna categoría entre los sexos y declaraba que la sociedad patriarcal debía tener un final. Esta disconformidad con el orden de Dios conduce a otro pensamiento más profundo como la aceptación de la homosexualidad y el lesbianismo, donde el hombre puede sentirse mujer y la mujer se puede sentir hombre. Es un cambio de roles para destruir la familia y donde la mujer se cree dueña de su propio cuerpo y pide a gritos derechos sin límites para matar a su propio bebé en el vientre como el aborto.

No se trata de machismo ni feminismo. Se trata de hacer la voluntad de Dios.

He sido testigo de las consecuencias del pastorado femenino: Una mujer con autoridad superior ordenando a los varones en temas espirituales y amonestándolos como si ella fuera un hombre. Generalmente en este tipo de congregaciones, los hombres tienden a preguntar todo a esa mujer y se crea un trato muy especial a las mujeres en esa congregación. Luego se empiezan a levantar otras mujeres como líderes y en algunas ocasiones llegan a tener más autoridad que el varón en la congregación. Como consecuencia, muchos hombres van perdiendo la autoridad, la masculinidad y la valentía y no se atreven a desafiar el sistema por temor a ser tachados como rebeldes dentro del sistema. Muchos otros ni siquiera se dan cuenta porque así fueron enseñados sin tomar en cuenta las Escrituras.

El clamor del Señor de Isaías 3 se vuelve a repetir: “¡Oh pueblo mío! Sus opresores son muchachos, y mujeres lo dominan. Pueblo mío, los que te guían te hacen desviar y confunden el curso de tus sendas” (Isaías 3:12)

En varias congregaciones, existe demasiado apoyo a las mujeres y a los jóvenes; si bien es cierto que Dios no hace acepción de personas, pero cada uno debe tomar su posición. La mayoría de jóvenes en esta sociedad son neófitos que todavía no están en la capacidad de hacer juicios por falta de experiencia y discernimiento espiritual, por falta de verdadera enseñanza de parte de los ancianos. Sin embargo, se les da mucha cabida cuando debieran estar aprendiendo de los hermanos más ancianos y las jovencitas aprendiendo de las ancianas.

La Biblia me enseña que las mujeres usadas por Dios como Abigail, Rut y las hermanas del Nuevo Pacto nunca se llegaron a levantar por encima de los varones sino eran mujeres sencillas y sumisas llenas de fé con mucho discernimiento espiritual y temor de Dios. Débora no fue una guerrera, fue como una madre para Israel pero no se tomó el protagonismo y le dijo a Barac que tomara su lugar como guerrero.

Por eso éste no es un llamado a los varones a ser fariseos en la letra para maltratar a las mujeres. Tampoco es un llamado a las mujeres para que nos convirtamos en esclavas sin voz ni voto en la sociedad. No es un llamado a que los hombres sean ásperos y necios en el trato con la mujer. Es un llamado a volver cada uno a nuestro lugar: el hombre como cabeza buscando el rostro del Señor para proteger y guíar a la mujer como su ayuda, la mujer como ayuda buscando al Señor para poder ser sumisa, dulce y afable para con su prójimo y sabiéndose someter a su marido para que los dos cumplan el propósito de Dios y siendo sal en este mundo de confusión.

Entendí que el problema de la iglesia que me mostraba el Señor es que la vestimenta y el maquillaje de esas mujeres eran un reflejo espiritual de su condición espiritual. Debemos volver a las sendas antiguas y perseverar en su Verdad para que este mundo no nos ahogue con sus vientos de otras doctrinas.

¡Ya no distorsionemos más su Palabra y pongámonos a cuenta con nuestro Dios porque Jesucristo viene pronto!
4 “Así que, como la iglesia está sujeta a Cristo, así también las casadas lo estén a sus maridos en todo.
25 Maridos, amad a vuestras mujeres, así como Cristo amó a la iglesia, y se entregó a sí mismo por ella,
26 para santificarla, habiéndola purificado en el lavamiento del agua por la palabra,
27 a fin de presentársela a sí mismo, una iglesia gloriosa, que no tuviese mancha ni arruga ni cosa semejante, sino que fuese santa y sin mancha.” Efesios 5:24-27

Wednesday, August 21, 2019

Dichosa de ser mujer

...una prosa

Le doy gracias a Dios por haberme hecho mujer y no hombre.
El hecho de ser mujer no me pone en una posición más baja que el hombre sino me pone en una posición escogida que debo aprender.
Como mujer quiero ser delicada como un vaso más frágil pero fuerte adentro porque mi Fortaleza viene del Señor y no de mí misma.
Como mujer, quiero ser más prudente entendiendo que el varón refleja la Gloria de Dios y posee el privilegio de autoridad sobre mí y el presidirme en el hablar.
No quiero ser Cabeza del hombre sino su cuello y su ayuda
Quiero aprender a callar y esperar mi tiempo cuando debo hablar y que mis dichos sean gratos delante del Señor.
Mientras callo, quiero meditar lo que escucho y alcanzar escuchar la voz de Dios para cuando sea mi turno, abrir mi boca con sabiduría y gracia de Dios.

Amo el ser mujer porque puedo persuadir sin palabras, puedo usar faldas largas y encantar a mi marido con mi arreglo y mi pureza, puedo trabajar con mis propias manos y dar cariño a los necesitados, también extenderla al pobre o un amigo, puedo llevar negocios para aumentar la productividad de mi familia, puedo escribir y componer aquello que voy aprendiendo para bienestar de los demás. Puedo alabar a Jesús, mi único Salvador, y entonarle un cántico espiritual.  
¡Oh Gloria a Dios por ser mujer!
¿Porque comformarme a las persuaciones que impone el mundo para que me ponga en contra de mi Dios?
¿Porque desperdiciar el privilegio de mi Dios para tomar otro lugar que no me corresponde?
¿Porque obstinarme en cambiar mi naturaleza y echar a perder mi femineidad y suavidad?
Oh mujer, hoy te conjuro a que hagas la voluntad del Señor y te rindas a sus pies, deja de querer ser Cabeza y sométete para que obtengas tu recompensa
Jesucristo te Consuela y te renueva...
Es mejor la voluntad del Señor que muchos caprichos cumplidos 
Toma tu cruz y sigue al Señor 
¡El te hace una nueva mujer! 
¡Mujer virtuosa serás!

Prácticas innecesarias y prácticas que faltan en la iglesia...


A continuación hago una observación y protesta en las cosas que se están popularizando en las Iglesias cristianas, algunas añadidas por el afán del deseo colectivo y otras que se están perdiendo a medida que pasa el tiempo.
Ya que las ovejas también tienen que orar por su pastor, es bueno estar alertas y no ver el problema para murmurar pero para ponerlo en manos de Dios y ponernos en acción para volver a la senda Antigua.

                          

Añadiduras

1. Ventas en el templo: Creo que la prioridad o "visión" como le llaman algunos se ha alterado de orden. Ahora vemos que el templo es primero y después las almas. Antes se veían las almas antes que el edificio hecho de manos. Nunca vemos en Hechos que los discípulos se ponían a vender comida para obtener más dinero y comprar una buena sinagoga o templo y luego ir a conseguir las almas, sino que primero evangelizaban y se reunían en pequeñas sinagogas o casas donde el Señor añadía y se iban multiplicando. Sigo creyendo firmemente que la iglesia debe sostenerse por medio de las ofrendas y dejar que Dios sea glorificado. Nosotros bien pudieramos decir: "Es para la obra de Dios!" pero recordemos que ESA NO ES LA MANERA como El Señor quiere que procedamos. Marcos 11:15: "...entrando Jesús en el templo, comenzó a echar fuera a los que vendían y compraban EN EL TEMPLO...y no consentía que nadie atravesase el templo llevando utensilio alguno. Y les enseñaba diciendo: ¿No está escrito: Mi casa será llamada casa de oración para todas las naciones? Mas vosotros la habeís convertido en cueva de ladrones." Hermanos, el problema es que la mercadería no le agrada al Señor en un lugar que se ha destinado para buscar el rostro del Señor y debemos extirpar esta práctica en nuestras Iglesias. Estoy más que segura que una vez que se hace se va a volver a hacer y será costumbre y los niños y las futuras generaciones pensarán que eso es colaborar con la obra de Dios pero la obra de Dios no abarca una compra y venta sino la predicación ponderosa del evangelio. Y no solo eso, hay muchas malas consecuencias en esta práctica: ¿Que pasa si un hermano no tiene para comprar? ¿Diremos: "tiene que pagar primero sino no le damos comida" cuando dice su Palabra que "al que te pida, dale"? Esto es una cadena que se va multiplicando y es una zorra pequeña que se ha ido metiendo a las Iglesias. ¡Hagamos algo!

Cantares 2:15: "Cazadnos las zorras, las zorras pequeñas, que echan a perder las viñas; porque nuestras viñas están en cierne"


Seguiremos analizando este tema para pedir la voluntad de Dios...Continuará...